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1. SocialNetworker y su integración en la Empresa Tradicional, por Eva Collado en su web www.evacolladoduran.com
Cada vez más, las empresas apuestan por candidatos con una buena reputación e influencia en las Redes Sociales. Personas con una huella digital potente que han sabido hacer de este medio algo clave en su desarrollo profesional y gestión del cambio. Es el nuevo talento social: personas que además de encajar en el perfil que se les necesita; pueden aportar a la empresa su influencia social, así como sus nodos de conocimiento externos, lo que representa todo un mundo de relaciones.
2. Cuatro Claves para un Plan de Reclutamiento Social #EmployerBranding, por Ximo Salas en su web ximosalas.com
El concepto de Reclutamiento Social (Algunos autores le llaman reclutamiento 2.0), surge como consecuencia de los cambios en los hábitos de comunicación de las personas y el uso masivo que estás hacen de las nuevas herramientas de comunicación social. Los cimientos de su funcionamiento están anclados en la generación de una «conversación continua» con los potenciales candidatos de tu empresa, iniciando una relación entre empresa y candidato que será el germen de los futuros procesos de selección.
3. Cuando los jóvenes son mentores de sus jefes, por Pilar Jericó en su web www.pilarjerico.com
En un mundo que cambia tan rápido necesitamos aprender, ser permeables a lo nuevo y a lo que está ocurriendo en el mercado. El conocimiento no solo está en las personas que albergan muchos años de experiencia, sino también en todo aquel que nos puede aportar una mirada distinta, como son los jóvenes. Por eso, no es de extrañar que muchas empresas se lancen a crear programas de mentoring inverso entre jóvenes y veteranos, para que los de menor edad enseñen sobre el manejo de la tecnología, sus costumbres y hábitos.
4. No te vayas todavía, no te vayas por favor, por Juan Martínez de Salinas en su web juanmartinezdesalinas.com
Muchas veces, la carga de trabajo impide mirar más allá y pensamos que si una persona tiene algún problema ya acudirá a RRHH. Sin embargo, para que esto se produzca, nuestras personas deben percibir que ese departamento está, en parte, para atender sus necesidades. Un buen departamento de gestión de personas (RRHH) debe preocuparse por conocer las expectativas y necesidades de todas las personas de la empresa. Esto sirve para conocer la temperatura existente en nuestras diferentes personas aunque muchas veces nuestro día a día nos lo impide.
5. Muerte y resurrección de Recursos Humanos, por Uxío Malvido en su blog Diversidad Corporativa
Cada cierto tiempo se anuncia la desaparición de Recursos Humanos. Hay todo un negocio «necRHológico» que se nutre de consultores y gurús varios, la mayoría bien intencionados, que buscan agitar la función para revitalizarla. Lo cierto es que la transformación de RRHH es continua pero no se aprecian indicios de colapso total. Más bien, lo que se percibe es una reinvención constante: surgen nuevos términos, se ensayan nuevas prácticas y se proponen nuevas agendas aunque, lamentablemente, permanecen también los antiguos problemas. El tiempo nos dirá cuáles de las supuestas tendencias actuales son temas de fondo y cuales pura cosmética.
6. Tres pasos para conseguir un ascenso, se un líder en crecimiento, por Ivonne Vargas en su web ivonnevargas.com.mx
Sin importar la actividad desempeñada, la necesidad de escalar a mejores oportunidades aparece en diferentes etapas de la trayectoria profesional. Un ascenso no cae del cielo, hay que ir tras él cambiando la forma de actuar en el trabajo. En particular, entre los 30 y 40 años aumenta el deseo de obtener un cargo relevante, porque ya se cuenta con experiencia y, en muchos casos, la persona conoce bien a la organización.
7. El Lenguaje silencioso en Recursos Humanos, por David Guzmán en su web www.david-guzman.com
Esta es una profesión de alto riesgo y, si eres mando intermedio más. ¿Por qué? Porque tienes la responsabilidad de cuidar de las Personas ¿hay algo más importante? Desde que me dedico a ello siempre lo he sentido así. Y en este objetivo, el lenguaje siempre me pareció una clave importante. Manejar el lenguaje de una forma «silenciosa» significa no ponerle intención. Liberar de argumentos que puedan generar o conformar opiniones sobre personas de una forma «irresponsable» y huir de la atribución emocional predefinida.
