Por Carlos Pardo, CEO Iberia y América Latina Meta4
2016 ha sido un año de grandes retos para la gestión de los Recursos Humanos y sin duda la digitalización ha sido uno de ellos. Tal y como muestra nuestro reciente informe sobre el grado de Evolución Tecnológica de los Recursos Humanos, desarrollado por IDC a través del análisis de más de 340 encuestas realizadas a empresas ubicadas en España, y América Latina, «a pesar de que la mayor parte de las organizaciones manifiesta contar con una estrategia de digitalización, en más del 51% de los casos esas estrategias no están unificadas o alineadas a los procesos de negocio»(*)
La revolución digital exige a las empresas transformar su visión tradicional en todo a lo que respecta a la gestión de su capital humano, por una visión de largo plazo que les permita gestionar y administrar al talento del futuro, necesario para llevar a cabo la transición digital de sus negocios.
Las nuevas tecnologías están posibilitando la descentralización de la gestión del talento como una actividad tradicionalmente relegada al ámbito de los Recursos Humanos, haciéndola parte protagonista de las actividades del negocio. De forma paralela, la tecnología está fomentando también una mayor integración y flexibilidad en las empresas, proporcionando a sus empleados una mayor participación, y la posibilidad de crear sus propias experiencias de trabajo. En este sentido, las nuevas tecnologías están transformando radicalmente a las organizaciones de Recursos Humanos en las empresas, y de redefinir el futuro de esta función.
Bajo este nuevo entorno, los procesos de gestión del talento ya no son una responsabilidad exclusiva de Recursos Humanos. Las tecnologías digitales están trasladando la información y la toma de decisiones a los empleados, y haciendo de la selección y retención del talento aspectos críticos y complejos para las organizaciones, frente a un gran contingente de nuevas generaciones de profesionales que se van incorporando en masa al mercado en espera de un ambiente laboral que fomente la innovación.
{{cta(‘b11d2d80-e264-4a0c-ab77-e187b9898f84’)}}
Y en esta transición de las organizaciones hacia lo digital, las empresas necesitan ser innovadoras y generar cambios profundos en sus procesos de negocio, haciendo uso de la tecnología e integrando en este proceso de transformación a todas y cada una de las personas que forman parte de la propia organización. Dentro de esta «Digitalización de los Recursos Humanos», también resultará necesario considerar cómo las empresas pueden hacer frente a la naturaleza cambiante del trabajo de esos recursos con aplicaciones y herramientas que faciliten la comunicación y la colaboración entre sus empleados.
No cabe duda por tanto que las nuevas tecnologías están transformando la concepción de los Recursos Humanos así como la forma en la que los empleados trabajan, interactúan y se comunican en sus lugares de trabajo. Aunque no conocemos cuál será el futuro de los Recursos Humanos, sí que podemos vislumbrar que lo digital adquirirá un papel aún más importante que el actual en todos y cada uno de los procesos que intervienen en la gestión del capital humano. Por ello, las empresas deben desde ya comenzar su transformación hacia lo digital, ya que sólo aquellas empresas que sean capaces de adaptar la digitalización a sus políticas de Talento de una manera óptima, serán las que consigan alcanzar el éxito en sus negocios.
(*) Fuente: Evolución Tecnológica de los RR.HH. en Empresas de Latinoamérica y España. IDC. Septiembre de 2016.