- ¿Qué entendemos por innovación?
Hoy en día, la palabra innovación se encuentra en la boca de cualquier ejecutivo o líder organizacional, siendo tan común que pareciera sonar como la moda del momento o como el artículo promocional del mes y quizás, para algunas compañías, esta es su realidad, que dicen o buscan ser innovadoras porque todo el mundo habla sobre el tema, pero lo cierto es que la innovación es un factor vital para diferenciarse en el mercado y garantizar la sostenibilidad del negocio, es decir, es un aspecto estratégico que debe estar presente en todas las compañías, ya sea como una competencia o como un área de desarrollo.
Una creencia popular sobre la innovación, es que se trata de una habilidad que tienen ciertos seres «especiales» que crean productos o soluciones de la nada, siendo prácticamente el resultado de su iluminación. Pero la realidad es que la innovación debe ser entendida como la capacidad, potencial o desarrollada, que tiene cualquier compañía para identificar todos los recursos que están en su entorno, analizarlos, relacionarlos e integrarlos frente a una necesidad, para así construir una solución, un producto o un servicio que rompe con viejos paradigmas o dinámicas de hacer las cosas. Podemos hacer mención a muchos ejemplos empresariales de este tipo, como lo son el Iphone, Airbnb, Uber, los coches inteligentes, Yelp, wearables de pago (medios de pago sin fricción), entre otros.
Evidentemente, para construir soluciones del calibre que acabo de mencionar se requiere de un equipo adicional altamente preparado, así como de cierto monto para invertir. Pero esto no puede ser un impedimento para que cualquier compañía apropie la innovación como una competencia que debe estar presente en toda la organización ya que, de lo contrario, pone el peligro su subsistencia. Además, en un mundo donde la economía colaborativa cada vez cobra más peso e importancia incluso en las relaciones organizacionales, iniciativas como el crowdsourcing o el crowdfounding se convierten en soluciones que abren las puertas al desarrollo de innovaciones a distintos actores, desde los emprendedores y las PYMES hasta las grandes compañías.
- Aportes de la innovación para la agilidad
«Locura es hacer la misma cosa una y otra vez esperando obtener diferentes resultados» A. Einstein.
La agilidad organizacional representa para algunas compañías un fuerte cambio en su forma de trabajar y hacer las cosas, salirse de su zona de confort para probar nuevas soluciones, lo cual también implica asimilar una cultura donde el error no es visto como algo negativo sino, por el contrario, como una oportunidad de seguir aprendiendo. Este es, precisamente, uno de los principios de la innovación, abrirse al mundo de las opciones, viéndolas como oportunidades para obtener mejores resultados de los que ya se vienen obteniendo.
Desarrollar la innovación como una competencia se convierte en una poderosa herramienta para articular la agilidad a lo interno de la organización, ya que invita a sus líderes y colaboradores a cuestionarse sobre sus procesos, comunicaciones, dinámicas de trabajo, uso de recursos tecnológicos y relación con el cliente, así como el abordaje de las tendencias del entorno.
Un ejemplo de esta situación, lo podemos ver en aquellas compañías que utilizan el Pensamiento de Diseño (Design thinking), como metodología para desarrollar nuevos productos, servicios o soluciones a través de la comprensión del cliente y de sus necesidades e idear prototipos que deben ser testeados antes de ver la luz verde para salir al mercado. Algunas de las organizaciones que son estandarte de estas prácticas son Apple y Lego, quienes constantemente monitorean las necesidades de sus clientes e innovan en los productos que les ofrecen.
- ¿Cómo lograrlo?
Desarrollar la innovación para impulsar la agilidad organizacional de una compañía representa un reto que parte principalmente de las personas, para luego traducirla en procesos y tecnología; de ahí que algunas recomendaciones a tener en cuenta son las siguientes:
- Promueva a través de sus líderes un cambio de paradigma, donde la proactividad de los colaboradores y el planteamiento de nuevas ideas y soluciones sea bienvenido, lo cual debería ser complementario a estrategias de capital humano que incentiven la agilidad.
- Desarrolle vigilancia tecnológica de las tendencias de su entorno, promueva en sus colaboradores la actualización constante de las tendencias del entorno y cómo estas podrían impactar al negocio, para así anticiparse a los cambios.
- Identifique las metodologías y herramientas que va a usar para promover la innovación, como el brainstorm, el mapa de empatía, los journey maps, los stroryboards, etc., los cuales también incentivarán el trabajo colaborativo, recurso esencial para la agilidad.
- Desarrolle la competencia de gestión del cambio en sus colaboradores, de manera que estos sean agentes de cambio y sepan adaptarse con facilidad a los mismos.