Por Carlos Paredes, Director de la revista RH al Día
Vivimos la construcción de los cimientos de una nueva era y esta situación nos afecta psicosocial y evolutivamente. Nuestra especie se está transformando y se producen cambios en la vida y en el trabajo.
Los retos de los gestores y formadores de talento aumentan en complejidad y el rol de ambos es vital para la supervivencia de los centros de trabajo.
Conocer los desafíos que plantea la nueva economía digital es crítico para comprender y adelantarse a las nuevas tendencias en el mundo del trabajo.
La nueva economía digital
La nueva economía digital está transformando el mundo y el éxito de los negocios ya no depende de los paradigmas de la economía tradicional. La velocidad que imponen los cambios de la nueva economía provoca una fuerte demanda de profesionales con formación digital. Expertos en distintas áreas afirman que hay un centenar de nuevas profesiones ligadas a la tecnología en las que se necesita formar nuevos alumnos. La Unión Europea advirtió que hasta el año 2020 más de 900.000 puestos de trabajos vinculados a la tecnología no podrán ser cubiertos.
Hoy la nueva economía digital forma parte de la vida cotidiana e influye cada vez más en la conducta, los deseos y las elecciones de las personas. La economía digital está moldeando un nuevo tipo de consumidor.
Hay aproximadamente 2,4 millones de aplicaciones disponibles; en el año 2014 se descargaron 2103 millones, que equivale a 800 aplicaciones por minuto en el mundo, de las cuales el 65 % son gratuitas. Las aplicaciones pagas generaron ingresos por 19.000 millones de euros en 2014, un 62% más que en 2013 y solo lo mitad de lo que se proyecta recaudar en 2015.
En los últimos años se adoptaron diferentes estrategias para acceder al consumidor y se popularizaron prácticas como la gamificación (motivar el consumo con premios) y el freenium (descarga gratuita del servicio básico y servicios adicionales pagos).
El consumidor de aplicaciones de teléfonos móviles es inquieto y muchas de las apps en las que confiaba hace un año ya no están instaladas en su aparato. Frente a las básicas como Facebook, Twitter o Instagram, el resto es muy volátil.
Internet está desplazando a la televisión. Los juegos son el principal atractivo: los internautas dedican el 43% de su tiempo online a jugar. El 26% del tiempo utiliza las Redes Sociales, el 10% en otros entretenimientos y apenas el 2% en noticias.
Economía digital y nuevas profesiones
Los puestos de trabajo están transformándose y, como consecuencia, también cambia la mentalidad de las personas que los ocupan. Como resultado de esta transformación, prácticas tradicionales como el organigrama vertical basado en el orden y la cadena de mando quedan obsoletas. El profesional busca una recompensa en su trabajo que excede la compensación monetaria y las empresas deben estar preparadas para ofrecerlo.
Los nuevos modelos de gestión de capital humano están impulsados por el ingenio, la tecnología y la invención del talento. En países como Estados Unidos el trabajo dedicado a generar nuevas ideas representa el 30% de la fuerza laboral.
En este nuevo contexto el talento y el conocimiento son los nuevos motores de la economía y sólo podrán sobrevivir los países, las empresas y las personas que lo entiendan y sean capaces de adaptarse a las exigencias de la nueva economía digital.