Por Emilio Martín Cros, Director de Preventa de Meta4.
¿Cuántas veces has oído las frases «como en casa en ningún sitio» o «todo queda en casa»? Son expresiones que se utilizan frecuentemente y que tienen mucha razón de ser. En muchos aspectos de la vida, y la internacionalización de las empresas no iba a ser una excepción, el poder gestionar todo «desde casa», desde nuestra zona de confort, nos proporciona un serie de ventajas que nos aportan gran estabilidad y seguridad. El ‘jugar en casa’ nos permite tener mucho más control lo que se traduce en procesos que finalizan de forma exitosa. En una época en la que los continuos cambios económicos han hecho que muchas empresas se embarquen en la aventura de la expansión internacional para probar suerte en otros mercados, no podemos olvidarnos del papel protagonista que juega la tecnología en todo este proceso, convirtiéndose en uno de los actores principales.
La inversión en innovación se ha hecho totalmente imprescindible para el éxito de las organizaciones ya que conlleva un aumento de productividad y resultados. Los continuos e imparables avances tecnológicos han facilitado que cada vez más empresas se embarquen en procesos de expansión internacional aumentando su presencia en numerosos países. Aunque son muchas las compañías inmersas en este proceso, no todas están obteniendo los resultados esperados y algunas de ellas están atravesando dificultades para poder gestionar sus recursos humanos, ya que la distancia implica tener en cuenta una serie de factores para que todo ‘marche sobre ruedas’.
Unificar y centralizar todos los procesos – en lo que a gestión de personas se refiere – se hace necesario si buscamos el éxito para nuestra compañía. De nada sirve tener un puñado de sedes repartidas por toda la geografía mundial si no se dispone de un sistema unificado que permita perseguir los mismos objetivos. Aunque inicialmente todo funcione a la perfección, lo que tenemos entre manos es una bomba de relojería que en cualquier momento puede estallar. Disponer de las mejores herramientas tecnológicas de gestión se hace imprescindible y debemos ser conscientes de que es preciso poseer la capacidad de responder a nivel global a las distintas exigencias locales, que conllevan unos métodos de dirección diferentes y unos modos de trabajar dispares.
Gestionar la compañía con un sistema tecnológico de recursos humanos global y único permite concentrarse en las operaciones y estrategia y lograr así la optimización de tiempos y el ahorro de costes.
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Como en cualquier estrategia empresarial, la previa definición de objetivos, tanto a corto plazo como a largo plazo, se hace absolutamente indispensable y permite a la dirección liderar el proyecto ofreciendo, en todo momento, una visión estratégica. Esta visión global, es totalmente necesaria para definir un modo de actuación común para toda la organización pero siempre debe estar alineada con las necesidades locales de cada país.
Existe mucha disparidad entre diferentes países y normativas y por ello siempre debemos implicar equipos locales para garantizar una implantación del proyecto exitosa. Al cruzar las fronteras debemos combinar una estrategia global con las exigencias de conformidad locales; y esto no resulta ni mucho menos una tarea sencilla. Las exigencias jurídicas en materia laboral, las reglas comerciales y las disposiciones legales varían de un país a otro, por lo que el peritaje local es fundamental para el éxito de un proyecto. Los primeros meses son cruciales y de ahí la importancia de disponer de un equipo dedicado en exclusiva al proceso para que todo salga como esperamos. Por supuesto, no podemos olvidarnos del Cloud, imprescindible ya en cualquier negocio ya sea a nivel local o global. A través de la nube las empresas matrices pueden definir el modelo de gestión de recursos humanos global y desplegarlo en cada país en que operen, respetando las particularidades laborales, legislativas y culturales de cada filial. La nube facilita que las compañías, sea cual sea su tamaño o complejidad, puedan disfrutar de servicios TI en entornos seguros. Con la tecnología Cloud, la aplicación se aloja en un servidor externo, por lo que no requiere de una instalación local por parte del usuario y es tremendamente ágil. Este sistema permite armonizar las políticas de recursos humanos y facilita que la solución pueda ser adoptada rápidamente por todas las filiales a escala mundial, integrándolas y conectándolas en un tiempo realmente reducido. De esta forma, las delegaciones del grupo pueden adoptar prácticas de recursos humanos corporativas, al tiempo que mantienen sus particularidades locales y autonomía de gestión en los procesos que dependan de ellas.
Unos objetivos previos definidos, un equipo dedicado en exclusiva al proyecto, contar con el apoyo local, una visión global, una solución cloud y no olvidarnos del reporting, entre los principales requisitos para lograr un proceso de internacionalización exitoso. «Unifica tu gestión y vencerás».